domingo, 1 de julio de 2012

Inhibición


Por: Fernando-x Arteaga

Asía con él  el prestigio de un adarve a las constelaciones; 
pendíamos de la tierra como curva del rayo de Zeus 
y abrazábamos los agujeros negros 
en el confín de la colisión de nuestras miradas, 
transpuestas al lúgubre  vacío astral.

Un hálito de él , 
taciturno entre galaxias colosas,
 prolijo en el escudo de mis nubes 
  pero gallardo cerca de mí letificó mis estelas en el cielo, 
signo levítico de sus ojos, 
de un pegazo sideral en la tenuidad del universo.

Lluvia de cometas entre nuestras armaduras, 
sutiles al zodiaco de nuestras caricias 
que cual estrellas fugaces,
inhiben su aparición para ser el letargo del amor.

Declive de asteroides, ría feraz sobre dos almas, 
sobre dos órbitas inmunes, 
entre Venus, Júpiter, Saturno o Vulcano 
o Andrómeda o Atenea o Afrodita,
la pradera de nuestro adarve, 
inhibición sobre ella  al volar.

Él , mi otro yo, el yo de géminis, 
es el melgo del signo de los astros, 
quien me ama en la frigidez de la tenuidad, 
sobre el espacio, sobre el pasaje que deliberamos emprender, 
fulgurante, lúgubre, estelífero, de dos, inhibido al cosmos.

Que la luna sea nuestro reparo y su luz nuestro custodio 
porque como luna el amor, como amor nuestros pasos; 
naufragarán los planetas entre nosotros 
pero no arrebataremos la órbita de nuestra vida,
 la inhibición de la libertad.

Doblegar la gloria jamás, moriremos en un diván, 
aguardando el agraz de nuestra corta permanencia 
junto a la estrella de mis noches, 
junto a ella mi eterno amor, aína inhibición.


Del poemario: "Amanecer Amar"
Año: 2008